La fuerza del destino (título original en italiano, La forza del destino) es una ópera en cuatro actos con música de Giuseppe Verdi y libreto en italiano de Francesco Maria Piave, basado en la obra teatral Don Álvaro o la fuerza del sino del escritor español Ángel de Saavedra, Duque de Rivas. Está claro que Verdi sentía inclinación por los temas españoles.
Fue encargada por el entonces Teatro Imperial, hoy Teatro Mariinsky, de San Petersburgo, capital del entonces Imperio ruso y estrenada, en ruso, con la presencia del compositor el 10 de noviembre de 1862 (29 de octubre de 1862, según el calendario juliano, todavía en vigor en el Imperio Ruso hasta 1918).
El público no quedó muy satisfecho con la obra, dado que esperaba un libreto menos dramático, más ligero. Pero a pesar de todo, Verdi recibió las felicitaciones del zar Alejandro II de Rusia, que acudió a la cuarta representación, y la crítica.
En España se estrenó en 1863, en el Teatro Real de Madrid, con la asistencia del mismo Verdi.
Verdi encomendó a Piave una revisión del libreto para el estreno italiano. Al parecer era demasiado violento, «debemos buscar la forma de evitar todos esos muertos», le escribió al libretista Piave. Éste enfermó y el compromiso recayó en Antonio Ghislanzoni, quien alteró radicalmente el final (en la primera versión Don Álvaro se suicida), el tercer acto y algunas otras partes. Verdi además recompuso el preludio y lo convirtió en una larga introducción con los motivos de la ópera. El estreno fue de esta segunda versión, la más conocida y grabada actualmente, ocurrió el 27 de febrero de 1869 en el Teatro alla Scala de Milán.
Esta obra tiene fama de gafe, pues tanto su composición como su estreno estuvieron plagados de desgracias y contratiempos que perduraron muchos años. Así, la noche del 4 de mayo de 1960, sobre el escenario del Metropolitan Opera House de Nueva York, el tenor norteamericano Leonard Warren falleció mientras cantaba É salvo! O gioia!.
La trama transcurre en España e Italia, alrededor del año 1750.2
Acto I Habitación del castillo de Calatrava, cerca de Sevilla
Don Álvaro es un joven noble de Sudamérica (presumiblemente Perú) que es en parte indio y que se ha establecido en Sevilla, donde, sin embargo, no se piensa bien de él. Se enamora de doña Leonora, la hija del marqués de Calatrava, quien, a pesar de su amor por su hija, ha decidido que ella se case sólo con un hombre de la más alta cuna. Leonora, conociendo la aversión de su padre, y profundamente enamorada de Álvaro, decide abandonar su casa y su país para fugarse con él, ayudada por su sirvienta, Curra.(A.:Me pellegrina ed orfana - "Yo, exiliada y huérfana").Su padre entra inesperadamente y descubre a Álvaro; él lo amenaza de muerte, y, para eliminar cualquier sospecha sobre la castidad de Leonora, Álvaro ofrece entregarse al marqués. Tira su pistola con tan mala suerte que del golpe se dispara y hiere mortalmente al padre de Leonora quien muere maldiciendo a su hija.
Intermezzo
Leonora y Don Álvaro huyen juntos, persegudos por el hermano de Leonora, Don Carlos. Los amantes son sorprendidos por una multitud y en medio de la confusión se separa; Leonora queda sola y, desesperada, decide disfrazarse de hombre para evitar ser victima de los hombres de mala fe.
Toda esta acción es obviada en la ópera, pasando del Acto I al II sin detenerse en la trágica separación de los amantes y la desesperación de Leonora. Yo suelo escuchar en este punto la Obertura a modo de Intermezzo, que describe musicalmente muy bien la huida de los amantes y su trágica separación. Me sorprendió gratamente descubrir que algunos Directores han optado por este mismo cambio! (http://www.hagaselamusica.com/notas/criticas/la-forza-del-destino-en-el-teatro-colon/ : "El director musical italiano Renato Palumbo utilizó la Obertura como una especie de "intermezzo" entre el acto I y el acto II, en una clara decisión para dar agilidad al transcurso de la representación")
Acto II
Cuadro I. Taberna en las afueras de Hornachuelos
El Alcalde, varios muleteros y don Carlos de Vargas, hermano de doña Leonora, están reunidos en la cocina de una posada. Don Carlos, disfrazado como un estudiante de Salamanca, bajo el nombre ficticio de Pereda, busca vengarse de Álvaro y Leonora (Son Pereda son ricco d'onore - "Soy Pereda, de noble ascendencia"). Durante la cena, Preziosilla, una joven gitana, narra las fortunas de los jóvenes y los exhorta a alistarse a la guerra (Al suon del tamburo - "Cuando suene el tambor") por la libertad de Italia, algo con lo que todos se muestran de acuerdo. Habiéndose separado de Álvaro, Leonora llega disfrazada de varón, pero se escapa sin ser descubierta por Carlos.- Cuadro II. Atrio del monasterio
Acto III
- Cuadro I Bosque próximo al pueblo italiano de Velletri, en Italia
- Cuadro II. Habitación de los oficiales
Cuadro III. Campamento militar cerca de Velletri
Don Álvaro se ha recuperado y se enfrenta a don Carlos. Empiezan un duelo, pero los soldados los separan a la fuerza. Mientras contienen a don Carlos, el angustiado don Álvaro jura entrar en un monasterio.
Los soldados se reúnen. Trabucco, un vendedor ambulante, intenta venderles sus productos; fray Melitón los sermonea por sus comportamientos viciosos; y Preziosilla los lidera en un coro en alabanza de la vida militar (Cr.: Rataplan, rataplan, della gloria - "Rataplán, rataplán, del tambor es la música que enardece el espíritu marcial de un soldado").
Acto IV
- Cuadro I. El monasterio
- Cuadro II. Exterior de la cueva donde vive Leonora
Donna Leonora: Rosalind Plowright
Preziosilla: Agnes Baltsa
Don Alvaro: José Carreras
Don Carlo di Vargas: Renato Bruson
Padre Guardiano: Paata Burchuladze
Fra Melitone: Juan Pons
Il Marchese di Calatrava: John Tomlinson
Curra: Jean Rigby
Un alcalde: Richard Van Allan Mastro
Trabuco: Mark Curtis
Un Chirurgo: Petteri Salomaa
Ambrosian Opera Chorus Philharmonia Orchestra
Giuseppe Sinopoli
LINK:
http://www.2shared.com/complete/VXm9r29J/Demonoid_Com-RESEED_Verdi_La_F.htmlLINK:
Hola ManuelV, primero gracias por toda la maravillosa musica y segundo por favor resubi el link de esta genial opera interpretada por Sinopoli. Saludos.
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